Escuela de narradores es el título del próximo bloque de nuestros programas de creación literaria dedicado a escudriñar la técnica de escritores de los cinco continentes a través de los ejercicios literarios y puzles de escritura de la clave N4.
Para inaugurar este bloque, la narrativa del escritor peruano Eduardo González Viaña y la prosa inconfundible del novelista, ensayista y periodista francés de origen argelino, Albert Camus, servirán de inspiración en el próximo puzle literario de la clave N4 de los talleres de escritura creativa de LIBRO VUELA LIBRE. Mientras que «Te doy una canción«, una bellísima composición del cantautor y poeta Silvio Rodríguez, protagonizará la actividad complementaria de dicha clave dedicada a las voces líricas cubanas de la Nueva Trova.
Disfrutad de la buena literatura con la que abren Albert Camus y Eduardo González Viaña nuestro nuevo bloque de Escuela de escritores, y permaneced atentos, tanto en los grupos presenciales como en los de la modalidad online, a los ejercicios literarios inspirados en la obra de ambos y en las letras de Silvio Rodríguez, cuyas instrucciones encontraréis en el interior del sobre de la clave N4.
La narrativa de Albert Camus y de Eduardo González Viaña en los ejercicios literarios y puzles de escritura de la clave N4:
Escuela de narradores, ejercicios literarios de la clave N4. Eduardo González Viaña, fragmento de «Una batalla perdida»:
-No se preocupe, doctor. Yo comprendo su situación. No quiera usted decirme, pero comprendo. Olvídese del pago de este mes. ya sé que es un caballero y que tiene toda una carrera por delante. He conversado con mi esposa, sabremos comprender. A usted y a la joven que desposará les daremos una pensión de comida. Me paga cuando pueda, cuando pueda.
-¿Cómo puedo hacerle comprender?
-¿Orgulloso?… Guarde usted su dinero… Deje eso…
Escuela de narradores, ejercicios literarios de la clave N4. Albert Camus, fragmento de «El primer hombre»:
En cierto sentido, estaba menos metido en la vida que su hermano Ernest, que vivía con ellos, pese a que este era totalmente sordo y se expresaba tanto con onomatopeyas y con gestos como con el centenar de palabras de que disponía. Pero Ernest, que de pequeño no había podido trabajar, había frecuentado vagamente una escuela y aprendido a descifrar las letras.
Actividades complementarias de la clave literaria N-40: Te doy una canción, de Silvio Rodríguez
Silvio Rodriguez, fragmento de «Te doy una canción»
Cómo gasto papel en recordarte,
cómo me haces hablar en el silencio.
Cómo no te me quitas de las ganas,
aunque nadie me ve nunca contigo.
Y cómo pasa el tiempo, que de pronto son años,
sin pasar tú por mí, detenida.
Te doy una canción, se abre una puerta
y de las sombras sales tú.
Te doy una canción de madrugada
cuando más quiero tu luz.
Te doy una canción cuando apareces,
el misterio del amor.
Y si no lo apareces, no me importa,
yo te doy una canción.
(…)
(…)