¿Cúal es el primer mandamiento moral que ha de tener un hombre? Los amantes del ensayo y la novela y, por extensión, todos los que transitan los territorios libres y afines de otros géneros literarios -como el cuento y la poesía– celebran el regreso de Ayn Rand a nuestro taller presencial de escritura creativa en Valencia. Hasta aquí llegan los gritos de bienvenida a esta escritora y filósofa ruso-estadounidense cuyas reflexiones sobre ética y estética nos continúan cautivando y de cuya memoria hemos rescatado este tributo a la libertad y a la razón:
«Si quisiera hablar con vuestro vocabulario, diría que el único mandamiento moral que tiene el hombre es: Pensarás. Pero un ‘mandamiento moral’ es una contradicción en los términos. Lo moral es lo escogido, no lo forzado; lo comprendido, no lo obedecido. Lo moral es lo racional, y la razón no acepta mandamientos.»
Ayn Rand
Ayn Rand y todos los autores que nos ayudan a generar pensamiento siempre tendrán abiertas las puertas de nuestro taller, porque cualquiera que desee navegar en las prometedoras aguas de la escritura creativa sabe que necesita fuertes dosis de nutrición y reflexión. Pero esta vez nos hemos permitido el lujo de recurrir a esta brillante pensadora para introducir a nuestro último homicida. Ya sabes que durante este verano nos hemos lanzado a la búsqueda y captura de cinco terribles enemigos de la creatividad, que empiezan a minar nuestras defensas desde muy niños; pues bien, ya hemos asediado al sexto: ¿quieres conocerlo?
Homicida de la creatividad número 6:
«La restricción de las elecciones: decir a los niños qué actividades deben practicar, en lugar de permitirles que se dejen llevar por su propia curiosidad y pasión. Es mejor dejar que el niño elija lo que le interesa, y apoyar esa inclinación.»
El espíritu creativo, Daniel Goleman
La restricción de las elecciones, la planificación inflexible y el apego incondicional, irrestricto, sin límite, a textos son el sexto enemigo de la creatividad. La creatividad siempre es amiga de la flexibilidad y languidece con la rigidez, abraza a los cuatro elementos: es libre como el viento, nutritiva como la tierra y apasionada como el fuego; pero sobre todo, y a todas horas, fluida como el agua.
LUNA de PAPEL te invita a su club de lectura y escritura:
Restricción de las elecciones, vínculos de la palabra:
Poner los ojos en, preferir, optar, escoger, seleccionar…
Dejar que la creatividad fluya como el agua de los arroyuelos.
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